El tren pasa por la almazara de San José camino de Guadix en el Valle del Zalabí. Granada no es solo la Alhambra y el Albaycín.
Al parar en Jódar sonrío y hago una foto, un clásico, como parar en Guarromán cuando haces el trayecto Madrid - Granada en coche.
Parada de tren Jódar-Úbeda |
Me fijo en el color rojo de la tierra y en el verde de los olivos perfectamente alineados, como ejércitos en son de guerra o cuerpos de baile en son de paz, me hipnotizan.
Un ejército de olivos: al frente la batalla, en la retaguardia los soldados esperan su turno en formación.
Un cuerpo de baile: al frente un grupo hace piruetas, detrás los bailarines esperan su turno en formación.
Los de delante están concentrados en lo que hacen, están pendientes de sus acciones intentando no perder la perspectiva general porque del movimiento de unos depende el de otros, si uno se confunde afecta a todos y hay que estar alerta para improvisar beneficiando al grupo.
Los de detrás observan en tensión lo que está pasando en el frente, están listos para actuar, esperan su turno, intentan estar en calma, pero están impacientes.
Yo lo miro todo desde la ventana del tren, y pronto desaparecen de mi vista.
Olivos |
Me acuerdo de las pipiranas (pipi-rana: ensalada de tomate y pepino) que nos preparaba mi abuela Encarna, la recuerdo también machacando almendras en el almirez.
Almirez |
Llego a Alcudia de Guadix, en el municipio de Accit, el campo está dorado como el aceite. Reservo un día para ir a los baños de Alicún y otro para subir al Puerto de la Ragua y pasar a las alpujarras Almerienses.
Mi abuela saca unas monedas de la lata que tiene guardada en la alacena y me las da, las reservo para comprarme algún capricho en la alcaicería cuando vaya en Semana Santa a Granada, y para tomarme un chocolate con churros en la plaza Bib-rambla.
El campo está dorado como el aceite |
Mi abuela saca unas monedas de la lata que tiene guardada en la alacena y me las da, las reservo para comprarme algún capricho en la alcaicería cuando vaya en Semana Santa a Granada, y para tomarme un chocolate con churros en la plaza Bib-rambla.
Lata |
Alacena |
Alcaicería |
Plaza Bib-Rambla. Granada |
Suenan golpes de aldaba en la puerta de la casa, el muchacho del pan trae las tortas de aceite.
Aldaba |
Me gustan las cuevas de los cerros encaladas, como las cuevas del tío Tobas y los aljibes, y la cerámica de Purullena, platos y tinajas, aquí se podría rodar Alibabá y los 40 ladrones mientras que a escasos 10km se ruedan los clásicos del lejano oeste entre Charches y las minas de Alquife.
Cerámica de Purullena. Granada |
En el pueblo Intento pasar desapercibida, una señora me pregunta en la plaza: —Y tú ¿de quién eres?
—¿Yo? De la Fina del médico.
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